INTRODUCCION A LA SEXUALIDAD HUMANA
Acerca de este curso
La búsqueda del conocimiento científico frente al saber vulgar sobre sexualidad, implica profundizar el conocimiento sexológico. Teniendo en cuenta que la salud sexual es parte de la salud integral de las personas. No podemos dejar de pensar nuestra práctica profesional también atravesada por nuestra propia forma de pensar y sentir la sexualidad. Como seres humanos, no estamos liberados de las influencias que nuestro entorno, experiencias vitales, creencias erróneas y mandatos trasmitidos generacionalmente; influyendo en nuestra forma de vivir la sexualidad y juzgar la de los demás, inclusive la de nuestros propios pacientes.
Es preciso reconocer que el conocimiento en sexualidad implica la incorporación de diversas dimensiones: cultural, social, biológica, psicológica, moral, afectiva. Por ende, ofrecer una visión integradora y no sesgada como profesionales de la salud, requiere afinar nuestra práctica profesional: conceptual, procedimental y actitudinal (el saber, el saber hacer y el saber hacer siendo)
Desde la antropología se reconoce que todas las culturas elaboran cosmovisiones de su concepción del hombre en el mundo. Imprimiendo en ellos, ideas, prejuicios, permisos, prohibiciones, normas que regulan las existencias de varones y mujeres. Desde este punto de partida cada persona como integrante de esa cultura, construirá su imaginario genérico, modulando y estructurando los vínculos sociales según estas reglas culturales.
Lo que somos es el resultado de ecuaciones complejas, nada exactas, poco previsibles, en las que se combinan factores sexuantes del orden biológico (cromosómico, gonadal, hormonal, neurológico), del orden psicosocial (ideologías, representaciones, imaginario colectivo, creencias, prejuicios, mitos, rituales, hábitos, costumbres, prácticas) en secuencia, ritmo, intensidad y tiempos bastantes regulares pero NO universales.
Entonces, entendiendo a la Sexualidad como componente esencial de las personas, núcleo de nuestra identidad y como tal ancla de la salud emocional, es, sin dudas, uno de esos aspectos fundantes de la personalidad, que se expresa durante toda la vida desde el mismo momento de la concepción. Es el resultado de la interacción de factores biológicos, psicoafectivos, socioeconómicos, culturales, éticos y espirituales estrechamente interrelacionados y multiarticulados con uno mismo y con los demás. Por ende se aprende, se transforma y se reaprende.
La sexualidad es mucho más compleja y diversa de lo que los seres humanos somos capaces de imaginar: la progresiva aproximación a su estudio científico nos sitúa ante un interesante laberinto cuyas claves sólo podemos encontrar en su abordaje multidisciplinario, desde una ética humanística crítica. Analizar la relación entre sexos, sexualidades y diversidad sexual, nos obliga a reconocer las insuficiencias de los referentes culturales que hasta el momento hemos construido y comenzar a sustituirlos por una visión más cercana a las realidades humanas, basada en la necesidad de crear y respetar nuevas normas que reconozcan la existencia de la diversidad sexual, con sus correspondientes derechos y deberes, límites y posibilidades por medio de los cuales se organiza sexualmente la vida erótica. Una visión que contribuya a eliminar la dominación y subordinación sexual como garantía de nuevas relaciones sociales y sexuales, de nuevas oportunidades de placer y elección.
Como en todos los campos académicos, hay definiciones que admiten varios criterios, y la Sexología no escapa a la regla, sino muy por el contrario. Hay conceptos básicos pero complejos que necesitan ser muy bien elaborados.
Según el Dr. Arnedo E. La Identidad de Género es la unidad y persistencia de la propia individualidad como varón, mujer o ambivalente, en mayor o menor medida tal como se la experimenta en la conciencia de Sí Mismo y en la conducta. (la sensación de uno mismo, la autopercepción) Marca todo lo que una persona siente, piensa, dice y hace. Responde a qué se siente.
El Rol de Género es todo lo que una persona hace y dice para indicar a otros o a sí mismo el grado en que se siente varón, mujer o ambivalente. Es la expresión pública de la identidad de género. Responde a qué se muestra. También puede definirse como la expresión de masculinidad o feminidad de un individuo acorde con las reglas establecidas por la sociedad.
Por otro lado la Orientación sexual: se refiere a las preferencias sexuales en la elección del vínculo sexoerótico. Es hacia dónde va dirigido el deseo a un objeto erótico- amoroso. Responde a la pregunta, quién o quiénes me gustan o atraen? Y Puede ser heterosexual, homosexual, o bisexual o una combinación en distinto grados de ellas.
Todos estos conceptos (IDENTIDAD DE GENERO, ROL DE GENERO Y ORIENTACION SEXUAL), en conjunto, articulados e irrepetiblemente conjugado en cada individuo forman la IDENTIDAD SEXUAL de una persona, desde el momento del nacimiento y hasta fines de la adolescencia, juventud o en algunos casos más.
Como hemos descripto, es necesario que como profesionales de la salud no repitamos conceptos confusos, mal transmitidos socialmente, incorporados a partir de mis experiencias como ser sexuado. Ya que la diversidad es característica implícita en el desarrollo de las sexualidades, atravesadas por una historia única, donde, situaciones traumáticas, sistema de apego, vínculos significativos han moldeado en cada individuo características de una sexualidad mas o menos saludable. Nuestra ética profesional requiere una mirada amplia y desprejuiciada a fin de no agregar más limitaciones o generar mayor confusión. Teniendo en cuenta que la palabra de un profesional de salud, lleva implícita un supuesto saber otorgado por la confianza de nuestros pacientes.
Contenido del curso
Conceptos y dimensiones de la sexualidad humana
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04:03
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Dimensiones de la sexualidad y biografía sexual
06:34 -
Discriminando conceptos : genitalidad, función sexual, sexualidad
07:21 -
05:08